
19.06.09, LA VANGUARDIA (ES). El líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Jamenei, insistió hoy en que no hubo manipulación en los comicios presidenciales del pasado 12 de junio en el país y descartó que se hubiese producido fraude, sobre todo porque "la diferencia" es "de 11 millones de votos". El ayatolá Alí Jameneí acusó además a los enemigos del Islam de intentar provocar inquietud entre los musulmanes y calificó de "terremoto político" y de una "fiesta histórica" las elecciones presidenciales del pasado día 12, que la oposición ha denunciado como fraudulentas. En un sermón ante decenas de miles de personas en la Universidad de Teherán, Jameneí destacó el hecho de que unos 40 millones de iraníes, el 85 por ciento de la población, hayan apoyado con su voto los principios de la revolución después de 30 años.
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